Bullying errores que cometí

El bullying en España aumenta

Cuando uno calla se debilita tanto, que se convierte en un ser insignificante ante un mundo de gigantes

Ver la entrada

España ocupa la tercera posición en casos de ‘bullying’ en el mundo, alcanzando cerca de 70.000 en el período 2022-2023, según un reciente informe de estadísticas internacionales sobre bullying.

Que es esta sociedad tenemos un problema de bullying es algo evidente, y esto pone de manifiesto la falta de concienciación.

Mientras los adultos miremos para otro lado, mientras las escuelas lo tomen como “cosas de niños” y mientras las Instituciones no tomen medidas contra los niños / adolescentes que hagan la vida imposible al que toman como presa, las cosas no van a cambiar.

Tenemos que dejar el miedo a un lado, tenemos que implicarnos cuando somos conscientes de que un niño esta sufriendo, da igual si no es nuestro hijo y sea el del vecino. Si somos capaces de ponernos en la piel de otra familia aunque solo sea por un minuto, seguro que somos capaces de tomar parte en algo tan atroz que devasta familias enteras.

En mi caso, si hubiera habido adultos con sentido común, no solo no habrían participado de aquel acoso, sino que lo habrían denunciado al colegio. Pero si de algo me di cuenta, es de que en general, nos cuesta ponernos al lado del débil y creo que este es uno de los principales problemas por el que el bullying aumenta, porque sin entender el motivo, creo que el grupo reducido que empieza a aislar y a humillar a un niño, va aumentado cada día, creo que la mayoría son personas con baja autoestima que para sentirse alguien, se hacen más fuertes cuando piensa que el de enfrente el débil.

En fin, este es mi mensaje, que por favor, seamos todos capaces de ponernos en la piel de los niños y las familias que sufren, porque entre todos, podemos ayudar a frenar la lacra del bullying.

En mi casp

Padres Helicópteros – Psicóloga (Psicóloga Cristina Polo)

Leave a comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Post anterior

Los errores que cometí

Próximo Post

Un perdón que me impactó